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Sitios que no volveré a pisar: Appinformática.

Sí ya se que no se puede decir de este agua no beberé o este cura no es mi padre. Pero tengo la firme intención de no comprar nunca más en esta franquicia, al menos mientras mantenga abierto el establecimiento en el que ayer viví uno de los sucesos más lamentables a los que me he enfrentado en mi vida de comprador: acudí con la intención de llevarme un disco duro para satisfacer la necesidad de almacenamiento que la afición a la fotografía digital me genera y, después de no sé cuanto tiempo, acabé firmando una hoja de reclamaciones bajo la supervisión de una patrulla de la policía municipal.

El caso es que Appinformática anunciaba en su página web un flamante disco duro de tres terabytes a un precio bastante razonable, lo que me animó a acercarme al establecimiento que esta franquicia tiene en mi barrio, bajo la creencia de que allí encontraría el producto. Es más, de camino, en los parabrisas de los coches aparecía anunciado otro disco duro de tres terabytes algo más barato, eso sí, de una marca con la que ya había tenido problemas en el pasado.

El caso es que llegado al establecimiento no tenían disponible ni el disco duro del que me había encaprichado en la web del vendedor, ni el que aparecía en el folleto, que ese mismo día habían estado colocando en el limpiaparabrisas de todos los coches del barrio. Molesto con la situación, si quería comprar en ese momento tendría que llevarme a casa un disco de una marca en la que no confiaba a un precio relativo (precio/capacidad de almacenamiento) mayor del que estaba dispuesto a pagar. Así pues, le pedí al dependiente que me «vendiese» un poco el disco que me ofrecía. Y su único argumento es que era de una gama más baja que el disco que yo quería comprar. Total, que me decidí a plasmar mi frustración en una hoja de reclamaciones: de no haber sido por la información engañosa de la página web y el folleto yo no habría aparecido por ese establecimiento, así que me sentía estafado.

Y aquí empezó todo. El dependiente se negó a darme una hoja de reclamaciones, escondiéndose en el local contiguo, una empresa de reformas que en la fachada lucía el cierre pero de la que, a través de la franquicia de appinformática, no paraban de entrar y salir personas ataviadas con indumentaria típica del que se dedica a pintar paredes y alicatar cuartos de baño. Tras prevenirle de que llamaría a la policía municipal el dependiente me amenazó, no sé si delatando algún delito de prevaricación, que podía llamar pero «que no iba a conseguir nada porque la policía municipal compraba allí». Y siguió negándome la hoja de reclamaciones, así que llamé a la policía municipal. Y las cosas empezaron a cambiar, un segundo empleado me amenazó con denunciarme por calumnias, ya que había dicho que hacían publicidad engañosa y lo tenían grabado en sus cámaras. Sí, lo hice, se lo dije a los dos empleados, ya que no había nadie más en el establecimiento en ese momento. Les dije que me sentía engañado por la publicidad que tenían en la página web y en el folleto, del que había un montón sobre el mostrador.

En el tiempo que tardó en llegar la policía la negativa a darme la hoja de reclamaciones pasó a ser un retraso justificado en que no sabían donde las tenían. Y las hojas aparecieron antes que los agentes. A los que esperé religiosamente para poder contar mi versión de la historia y, ya puestos, hacer constar que la licencia de actividad del negocio no estaba expuesta al público en ninguna parte. El caso es que yo me fui con mis copias de la hoja de reclamaciones y la policía se quedó allí conversando con el personal del establecimiento.

Si bien es cierto que nadie me obligó a comprar el disco duro y que en algún momento desde que empecé a escribir en la hoja de reclamaciones y acudió la policía municipal se me ofreció encargar una unidad del producto que me había hecho ir al establecimiento, me parece una práctica engañosa y una estrategia sucia para colocar al comprador mercancía de menor calidad y con mayor margen de beneficio. Básicamente porque si tengo la necesidad imperiosa de comprar el disco duro me veo obligado a llevarme el que en ese momento está en el establecimiento, en lugar del que se ofrece en la página web o en el folleto publicitario. Se te ofrece una cosa y, en el momento que vas a comprar, tienes que llevarte otra de peor calidad o con un precio menos ventajoso para ti como consumidor. Seguro que para la franquicia es una práctica bien lucrativa: entregar mercancía bajo pedido o colocar, en caso de necesidad, el producto que mayor margen de beneficio le genera. Así pues, para mí, si no es una estafa en toda regla, al menos, es una práctica de competencia desleal para con otros comercios del sector.

El caso es que han perdido un cliente que, posiblemente, acabe comprando el producto directamente a China, a través de alguno de esos proveedores que han demostrado merecer más confianza que algunos comercios de proximidad. Por cierto, ante este y otros episodios vividos en este establecimiento, la falta de profesionalidad de los dependientes y otros detalles, me pregunto seriamente si la franquicia no será una tapadera para blanquear el dinero de las reformas sin factura con empleados sin papeles que tienen pinta de hacerse desde el local contiguo a la tienda de informática.

¿Por cierto, alguna sugerencia de disco duro y establecimiento donde acudir a por él?

158 respuestas a «Sitios que no volveré a pisar: Appinformática.»

respecto a los comentarios de app salera , decir que gente insatisfecha y encima sin tener razon hay en todos los sitios, lo que no pretendan es tener razon cuando no es posible, de ahi los comentarios absurdos y sin sentido, es muy facil difamar desde la cobardia y ocultacion, si lo que dicen no estan deacuerdo se pone una reclamacion, y si tienen razon es cuando se puede criticar, en mu caso y conozco muchos mas , ya que yo soy cliente de ellos gracias a un conocido , su servicio ha sido impecable y me han arreglado reparaciones que otros ni siquiera lo han intentado.

Entiendo tu indignacion,a mi me ha pasado algun caso parecido,pero recuerda que app son franquiciados.

En mi tienda app se han portado bien conmigo y el trato es bueno y siempre traen el producto que yo quiera

En cuestion de Disco duro yo recomiendo Toshiba,no te recomiendo WD se me fastidiaron 2 y casi todos los que he montado en otros equipos dieron problemas.

Nosotros en clase hicimos un estudio sobre las reparaciones y mas concretamente de esta cadena de App que en Valencia hay a montones. En un Pc de sobremesa le hicimos una averia para posteriormente llevarlo a reparar a esta cadena de tiendas, exponer aqui los resultados no debo hacerlo, pero despues de mas de 10 tiendas, en TODAS nos dieron presupuestos de lo mas diferente y cada uno decia que la averia era por tal pieza, que de 10 tiendas solo acerto 1, el resto cambiaban piezas a ver si sonaba la flauta, hubo presupuestos desde 20 euros hasta 230 euros.

Cual era el problema?, pues la fuente se saturaba cuando se calentaba por un problema interna. Nadie menos una tienda fue capaza de comprobar esto, todos iba a cambiar que si la placa, que si la ram es antigua etc etc etc

 

En fin que lo que hacen es solo sacarte la pasta pero pocos muy pocos profesionales de la informatica hay, solo niños en practicas, nada mas, y lo de los precios es de guasa, en la web un precio luego vas a la tienda y vale otra cosa, o pides una pieza que vale tal precio, y cuando llega esa pieza vale mas

Por eso y mas decidi dejar de ir al app y solo compro a una que para mi es de lo mas profesional en todo y precios muy bien, el dia que me fallen y llevo comprando muchos años, pues me buscare otra

 

Sobre app son pufff, te dan la razón pero no te hacen ni caso te dan largas hasta que te aburres, ya no compro mas. Como tengas un problema con algún producto de internet te lo comes.